Nuevos retos para el
docente venezolano
Trabajar más de 20 años en
Educación Primaria Básica y Superior a distancia al mismo tiempo; me ha permitido tener un panorama de antes y
después en la educación en mi país, Venezuela. He pasado por talleres de
inducción, novedosas planificaciones,
nuevos enfoques, estrategias, sistemas de evaluación y recursos tecnológicos,
siempre con el énfasis de “esto se hace ahora y ya,…” pero con pocas
explicaciones de cómo se han tomado decisiones, o qué realmente se desea
lograr. Y no faltó pregunta, o desacuerdo, siempre las “nuevas” políticas se han cumplido de manera un poco
azarosa, con el signo de la inmediatez y con mucha palabra, acto de instalación
y aplausos. No puedo decir que todas las experiencias fueron malas, pero, su implementación con poca o ninguna
evaluación y los vertiginosos cambios políticos locales y nacionales
limitan ver realmente el horizonte y reaccionar en forma razonada, inteligente
y proactiva a tales reestructuraciones, que finalmente son una simbiosis de
ideas que desean “satisfacer” una ideología con la premisa de “esto es lo que
el “pueblo” necesita.
En el tiempo he visto como poco a
poco ha ido mermando la capacidad de los educadores para motivar al aprendizaje
y obtener conocimientos realmente útiles; para con ello beneficiar a todos. En
escuela Básica se sigue con la
repetición de textos, y, aunque se ha fortalecido en parte el aspecto de
estrategias de aprendizaje, todavía falta mucho para que los docentes puedan
encauzar a sus alumnos hacia un pensamiento crítico, universal y solidario. Los
“muchachos” de mi país, como yo los llamo , aquí en Guatemala “patojos”, cada día tiene más dificultad para
encontrarle sentido a los contenidos curriculares, siguen haciendo la “tarea” o
asignaciones de casa como algo que se le ocurrió al maestro, y siguen siendo
aburridas, poco motivantes o con poco significado para ellos. No obstante, aquí debo salvar a algunos docentes que salen de esta norma, docentes que no se someten a las políticas de manera
ciega y que administran sus cursos con
gran autonomía. Esta situación pasa también en Educación superior a distancia.
El ceñirse de manera rígida a un Plan de trabajo, Plan de estudio, como quieran llamarlo es fácil, y
una tentación en la que se cae por muchas razones, que no son para analizarlas
en este escrito. Lo que se debe puntualizar es que tanto en la escuela Básica
como en Educación Superior a distancia
el profesor debe impulsar a la búsqueda, a la pregunta, a la intriga por la
novedad, al trabajo continuo, a la identificación del futuro y nuestro papel en
el.
La reflexión de hoy es sobre el
modelo de educación que tenemos hoy día en Venezuela, la familia que estamos
formando en una cola para alcanzar los alimentos básicos del día para poder
subsistir, las escuelas y universidades que cerrarán varios días a la semana por falta
de luz, la violencia y corrupción en todos los niveles, en fin la educación en
un país “ en guerra sin guerra”
Educar en esas circunstancias se
convierte en una acción compleja, de dimensiones enormes para ser abordada, y
estas palabras las dejo a mis ex alumnas, que ahora son profesionales, a mis
compañeras de trabajo que aún permanecen en sus puestos de trabajo. Es una
reflexión para tomar acciones, empezar a estudiar de nuevo, para ver dónde está
lo equivocado, que se debe cambiar inmediatamente?, cómo proceder en la
escuela, o en la universidad?, ¿que pasa con la convivencia social ?, cómo la
llevamos? De que manera podemos empalmar
viejos y nuevos modelos?, se podrá hacer esto? En la reflexión de hoy estimo
que la investigación educativa tiene la oportunidad de hacer grandes aportes en
esta hora ciega de Venezuela. Es tiempo de subrayar realmente lo social,
rescatar y hacer crecer la visión múltiple haciendo uso de las tecnologías,
empezar a desempacar y hacer libres los pensamientos , entrelazar metas,
proyectos , caminos sobre la base de una realidad posible y que se de en
perfecta y permanente construcción. Estoy segura que hay gente capaz, preparada
para este reto de empezar a ver el país desde otras perspectivas.
El sentimiento, la Idea, la
palabra, la acción.
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